No es la primera argucia para conseguir un iPhone liberado. Ni siquiera es el primer sistema que se basa en una tarjeta (ya vimos la StealthSIM). Pero la Universal SIM Unlock Card, además de ser una de las alternativas más económicas para liberar el teléfono táctil de Apple, también funciona con muchos terminales de firmas como Nokia, Samsung, LG o Motorola.
O al menos, eso es lo que promete esta pequeña tarjeta. Tiene 0,1 mm de grosor y se acopla a la tarjeta SIM del teléfono para que las introduzcamos juntas en su correspondiente ranura. Su misión consiste en “engañar” al teléfono, especialmente a los que no están liberados, para que podamos usarlo en la red de cualquier operador telefónico.
Es compatible con muchos teléfonos, pero tiene una pequeña trampa: en muchos casos, como el del iPhone, tendremos que hacer unos pequeños cortes en nuestra propia tarjeta SIM. Este accesorio lleva dos pequeños triángulos microperforados en su parte superior: A y B. Con algunos teléfonos, no tendremos que hacer nada; pero con otros, tendremos que cortar la tarjeta siguiendo las líneas del triángulo A, del B o incluso de los dos.
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