Fuente: rtve-es
MotoGP. Stoner y Rossi salen ganando de Australia
Casey Stoner volvió a ser profeta en su tierra. Y en el peor año de su carrera deportiva, con una enfermedad que lo dejó en casa en tres Grandes Premios. Phillip Island volvió a ser el revulsivo que buscaba y el piloto de Ducati sumó su tercera victoria del año. En la segunda vuelta se puso al frente del grupo y ya no abandonó ese puesto hasta el final.
Y eso que Valentino Rossi le puso contra las cuerdas. El italiano fue el único que soportó el ritmo marcado por la Desmosedici e inquietó la victoria de Stoner hasta la última vuelta. Las ansias de triunfo de Rossi eran, como siempre, altísimas. Y eso que se encontró con una circunstancia de lo más favorable nada más salir.
Y es que Jorge Lorenzo quedó fuera de la carrera al caerse metros después de tomar la salida. El mallorquín, que salió mal, quiso avanzar posiciones rápidamente y tocó a Nicky Hayden por detrás. Lorenzo pareció retomar el rumbo pero un segundo después se caía de la M1, despidiendo así sus opciones al título. No de forma matemática, pero casi.
Stoner y Rossi disputaron su carrera, mientras que los demás intentaban mantener el tipo. Dani Pedrosa, autor de otra salida fulgurante que lo puso al frente del grupo, pasó a la tercera plaza tras la primera vuelta y ahí se mantuvo, rodando en solitario. Por novena vez este año se subió al podio. En esta ocasión, al tercer cajón. Pedrosa entró por meta a 22 segundos de Stoner.
En la general, Rossi es más líder tras la caída de Lorenzo. El mallorquín está ahora a 38 puntos del italiano. Casey Stoner sube a la tercera plaza en detrimento de Dani Pedrosa.
A Rossi le basta un cuarto puesto en Malasia para adjudicarse su noveno campeonato del mundo.
250 cc. Simoncelli pone el Mundial al rojo vivo y Bautista se queda frío
El Mundial de 250cc se puso al rojo vivo tras el GP de Australia. La victoria de Marco Simoncelli, la sexta del vigente campeón este año, le coloca a sólo doce puntos del líder, Hiroshi Aoyama, que hoy no tuvo su día y acabó en séptimo lugar. Claro, que el japonés recibió la inestimable 'ayuda' de Álvaro Bautista. El de Talavera se cayó cuando rodaba en segunda posición y cruzó la meta en décimo lugar.
El podio lo completaron Héctor Barberá, en la segunda plaza, y el napolitano Raffaele de Rosa.
Simoncelli no tuvo rival en toda la carrera. Con un Aoyama mucho más discreto que de costumbre, el italiano se lanzó hacia la victoria en los primeros giros, cuando adelantó sin problemas al hombre-'pole', su amigo Raffaele de Rosa. A partir de ahí, sólo Héctor Barberá pudo inquietarle un poco, aunque sin llegar nunca a pasarle.
Álvaro Bautista volvió a realizar una buena primera mitad de carrera. El de Talavera, que salía desde la tercera fila, consiguió remontar posiciones rápidamente. A falta de doce vueltas para el final, ya rodaba en segundo lugar, tras adelantar a Barberá. El piloto de Mapfre Aspar veía ante sí una magnífica oportunidad para recortarle puntos a Hiroshi Aoyama, el líder, que rodaba en la séptima plaza.
Pero a falta de ocho vueltas para el final, Bautista se cayó. Y aunque pudo reincorporarse a la pista, sólo pudo ser décimo. Aoyama, por su parte, acabó en séptimo lugar, sacándole aún más puntos.
La carrera tuvo que finalizar a falta de seis vueltas para el final, por una caída grave del italiano Roberto Locatelli, que obligó a sacar la bandera roja. Al haberse corrido dos tercios de la carrera, las posiciones finales fueron las que había en el momento de la interrupción.
En la general, Aoyama es líder con 227 puntos. Simoncelli pasa al segundo puesto y se queda a doce puntos del japonés. Bautista es tercero, a 29. Sin depender de otros resultados, el de Talavera está obligado a ganar en Malasia si quiere llegar con opciones matemáticas de título a Valencia.
125 cc. Victoria y título para Julián Simón
Su decisión fue la acertada. Julián Simón demostró al mundo entero que, a veces, un paso atrás, puede significar diez adelante. Su decisisón de descender de cilindrada dio sus frutos hoy, con la conquista del título de campeón del octavo de litro. Y todo ello tras una temporada brillante, en la que ha podido, al fin, demostrar su clase.
Julián Simón, un piloto querido por todo el paddock, realizó una carrera espectacular en Australia. Su objetivo era sólo uno: quedar por delante de Bradley Smith, algo que parecía complicado tras su deficiente salida, que lo situó en el octavo puesto.
Por delante se formó un nutrido grupo de pilotos, con Pol Espargaró en cabeza, junto a Corsi y Bradley Smith como principales rivales. Simón, agazapado enmedio del grupo, esperaba su oportunidad.
Poco a poco fue avanzando posiciones - lo necesitaba, puesto que Smith rodaba líder-, hasta que en la 14ª vuelta se colocó al frente. A partir de ahí entabló un bonito duelo con Smith, compañero de equipo en el Bancaja Aspar y máximo rival en la lucha por el título. Smith recuperó el mando de carrera a falta de siete vueltas y Simón fue, literalmente, su sombra.
En la última vuelta, Simón lanzó su ataque, adelantando magistralmente a un Bradley Smith que no pudo reaccionar. El de Villacañas rodó confiado hasta la meta y cumplió su sueño: ser campeón del mundo…
…El podio lo completaron Bradley Smith y el alemán Sandro Cortese. Pol Espargaró fue cuarto, mientras que Nico Terol y Efrén Vázquez acabaron en la 6ª y 7ª plaza.
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