De Jose Manuel Nieves (el 04/07/2012 a las 15:17:13, en Ciencia)
La unificación de las fuerzas
Existen cuatro fuerzas fundamentales en la Naturaleza: electromagnetismo, fuerza nuclear fuerte, fuerza nuclear débil y gravedad. Cada una de ellas cuenta con una partícula "mensajera" que es la que transporta la unidad mínima de cada fuerza concreta (por ejemplo, el fotón para el electromagnetismo y los bosones W y Z para la fuerza nuclear débil). Y los físicos están convencidos de que es posible unificar las cuatro fuerzas en una única teoría que las englobe a todas.
A finales del siglo XIX, James Clerk Maxwell dio el primer paso hacia esta "gran unificación" al descubrir que la electricidad y el magnetismo son, en realidad, una única fuerza que se manifiesta de dos formas diferentes. La partícula mensajera para ambas, en efecto, es la misma: el fotón.
Ahora, el bosón de Higgs haría posible "unificar" con el electromagnetismo tambi�©n la fuerza nuclear débil, que es la responsable de la desintegración radiactiva de las diferentes partículas. Basta pensar en los avances que permitió la comprensión de la fuerza electromagnética (unificada) para darse cuenta de la importancia, y las posibilidades, que tendrá la nueva "fuerza electrodébil".
Mucho más adelante, quizá, será posible unificar también la fuerza nuclear fuerte (que es la responsable de la cohesión de los núcleos atómicos y cuya partícula mensajera es el gluón) y la gravedad, la auténtica "bestia negra" de la Física actual, ya que se resiste más que ninguna otra a ser "cuantificada" por los científicos.
Supersimetría
Otra teoría que seguramente se verá afectada (y mucho) por el descubrimiento del Higgs es la de la Supersimetría. Según esta idea, cada una de las partículas conocidas debe tener una "superpartícula" asociada, muy parecida a su "socia" pero con características sutilmente diferentes, entre ellas una masa mucho mayor.
Y a pesar de que hasta ahora no hay evidencias experimentales que la validen, la Supersimetría resulta enormemente atractiva porque podría contener las claves para la unificación de las dos fuerzas de la Naturaleza que aún se nos resisten, las ya citadas fuerza nuclear fuerte y la gravedad.
E incluso podría suministrar una partícula candidata a ser la unidad mínima de materia oscura, esa "otra clase" de materia de la que no sabemos prácticamente nada y cuya existencia conocemos sólo por los efectos (gravitatorios) que produce en la materia ordinaria, que sí podemos ver.
Por supuesto, todos estos nuevos conocimientos teóricos llevarán a un incontable (e imprevisible) número de aplicaciones prácticas que, hoy por hoy, ni siquiera podemops atisbar. Pensemos lo que sería el mundo sin electricidad, energía atómica, Internet, electrónica... es decir, si nunca hubéramos luchado por comprender cómo funciona el electromagnetismo o la energía atómica.
Dicen que, en pleno siglo XIX y durante una presentación pública, un político preguntó a Michael Faraday, descubridor de la inducción electromagnética, para quïén demonios podría servir su descubrimiento. A lo cual Faraday respondió: "señor, no estoy muy seguro, pero es más que probable que dentro de veinte años usted cobre impuestos por ello".