La tecnología nipona también sirve para sublevarse contra el sistema establecido. La artista japonesa Momoyo Torimitsu ha dado vida (y nunca mejor dicho) a Miyata Jiro, un robot con forma humana con el aspecto del perfecto hombre de negocios japonés, que se arrastra por el suelo en actitud humillante. Una performance de increíble realismo.
Torimitsu llevó a cabo su representación en las calles de Australia ante un público atónito que contemplaba como la artista, vestida de enfermera, le ajustaba los mecanismos a su hombre de negocios como si de una inyección se tratara, cambiaba su batería y mostraba que realmente era un androide. Todo ello para simbolizar al empleado medio japones destruido frente al crash económico que, según Torimitsu, se avecina en Asia.
No sabemos si el público presente entendió la simbología del mensaje de Momoyo Torimitsu. Pero, con la creación de un hombre que repta por las calles, los dejó totalmente flipados. Eso seguro.