Esta imagen podría confirmar la leyenda urbana de la abuela que se quedó atrapada en el jersey que estaba haciendo, si no fuera porque la que está recibiendo en su cara todo el calor del portátil es poco probable que tenga abuela (o que la reconozca como nieta). Ésta funda para cabeza, manos y portátil está ideada para mantener tu intimidad y tu calor. La primera pregunta es: ¿para qué quieres intimidad si no puedes hacer nada con las manos, aparte de escribir? Y la segunda: ¿cuánto tiempo podrás aguantar el calor del portátil sumado al de la lana sin desmayarte? Otro modelo, después del salto. (más…)
Colocada convenientemente también sirve para oler tus propios pedos. Si es que este invento lo tiene todo oye.
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