Fuente: tuexperto.com
A todos nos ha pasado algo parecido. Dormimos tranquilamente la siesta y llaman a la puerta. Nos levantamos, caminamos hasta la entrada de casa y al abrir nos encontramos con el típico vendedor de enciclopedias que piensa que la mejor hora para buscar compradores es de 3 a 5 de la tarde. Esto es algo que podríamos evitarnos con la Spyhole Camera: una mirilla con cámara de vídeo integrada y conectada a la TV.
Una forma de saber quién está al otro lado de la puerta con sólo mirar la pantalla del salón, sin tener que andar de puntillas hasta la entrada para que el ruido no nos delate (no vaya a ser la suegra o el vecino pesado del quinto). También puede grabar las imágenes, como aquel espejo retrovisor para el coche, pero en blanco y negro, eso sí. Cuesta al cambio unos 170 euros, aunque de momento la tienda Techstore sólo lo distribuye dentro de las Islas Británicas.
Vía: OHGizmo!
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